Todo el mundo sabe que viajar a la Gran Manzana no es barato. Estados Unidos tiene unos precios altos en general y, además, se trata de un país donde la gran mayoría de cosas que se pueden hacer son de pago. Aunque los vuelos hayan bajado de precio considerablemente en los últimos años por la aparición de compañías como Norwegian o Level, el alojamiento se nos puede disparar haciendo que nos gastemos una pasta en este viaje. En este post os quiero explicar algunos trucos para disfrutar de NYC sin tener que pedir una hipoteca.
Alojamiento: Esto ya lo comentaba en otro post (To Do List para un viaje a Nueva York) pero lo vuelvo a explicar aquí: uno de los grandes trucos para ahorrar en Nueva York es no dormir en Manhattan. El metro comunica la ciudad de forma excepcional y desde muchas zonas de Brooklyn o Queens hay menos de media hora en transporte público hasta los puntos más emblemáticos de la ciudad. Además, desde mi punto de vista, son barrios mucho más auténticos y menos turísticos, donde puedes disfrutar un poco mejor de la vida real en la ciudad (los sitios muy turísticos no acostumbran a encantarme). En nuestro último viaje hemos dormido en Brooklyn, en este apartamento tan top. El coste era de unos 80€ la noche cuando en apartamentos del estilo en Manhattan nada bajaba de los 200€ la noche.
Además de la zona, recomiendo mucho el apartamento en vez del hotel. Nueva York (America en general) no es un país donde se coma genial, acostumbran a ser comidas copiosas y muy calóricas por lo que hacer las 3 comidas al día fuera puede hacer que te sientas super pesada/o. El tener apartamento te permite hacer los desayunos cada día en casa (que esto te ahorra tiempo y dinero) y si no tienes ganas comer fuera, comprar una ensalada o algo para hacer en el horno y no tener que preocuparte.
Transporte: Hablamos de una ciudad enorme que por mucho que quieras no vas a poder recorrer a pie. El transporte público tiene un coste de $3 el trayecto. Lo ideal nada más llegar es sacar la MetroCard, una tarjeta que tiene dos modalidades: o versión monedero que recargas y vas pagando cada viaje por separado pero por un coste de $2.75 el trayecto o compras la Metro Card ilimitada de 7 o de 30 días. La de 7 tiene un coste de $33 (con 11 viajes ya la has amortizado) y la de 30 tiene un coste de $127. Nosotros calculamos y sin duda alguna nos salió a cuenta tener la ilimitada de una semana. Se compra en todas las máquinas de todas las estaciones.
Museos: si estás planeando un viaje a NY seguramente tengas en mente algún museo: el MoMa, el de Historia Natural, el del 11-S...los museos en esta ciudad son caros si no sabes dos trucos. 1. casi todos los museos tiene entrada gratis un día a la semana: el MoMa los viernes, el del 11-s los jueves (con entrada anticipada)....revisa si los que quieres visitar tienen esta opción y añádelo al planning teniendo esto en cuenta. 2. Hay otros museos que tienen la modalidad de "pay what you wish" que significa: paga lo que desees. Tienen un precio recomendado (el Museo de Historia Natural por ejemplo te recomienda que pagues $32) pero puedes decidirlo tu.
Entradas para Broadway: si tienes un musical decidido, esta opción no te sirve. En esta última visita a NY yo tenía claro que quería ver el Moulin Rouge (una pasada por cierto) y tuve que comprar las entradas por la totalidad de su precio. Si en cambio lo que quieres es vivir la experiencia de un musical en Broadway pero te da un poco igual, te recomiendo que vayas a la oficina de Tickets que hay bajo las escaleras de Times Square. Allí ofrecen entradas para el mismo día (solo last minute) a un precio mucho inferior de lo que las compras con antelación. Lo he hecho dos veces y realmente nos ahorramos ma´s del 60% del precio original.
Comidas y bebidas: NY está plagada de sitios super TOP donde comer, así que el consejo NO es que no comáis fuera. Al revés: es que compaginéis comer en el apartamento con comer en sitios guays. Lo que quería explicaros en este apartado es que el alcohol es carísimo en NY y el agua gratyis en todos lados (parece obra de Carlos Ríos...). Además, tened siempre en cuenta que del precio que encontréis en la carta, hay que sumarle alrededor del 35% entre tasas y propinas.
Actividades gratis: aunque muchísimas son de pago, hay miles de planes para hacer en NY gratis. Aquí os dejo algunos de mis preferidos: pasear por Central Park, ir a Dumbo en Brooklyn para tener unas vistas espectaculares del puente y el skyline, si vas en Navidad ir a Dyker Heights dónde la decoración navideña real supera a la ficción, pasear por el High Line de Chelsea y luego aprovechar para ir a su mercado, visitar Williamsburg y sus mercadillos hipsters, entrar a ver el Oculus, la estación diseñada por Calatrava que es un espectáculo, coger el ferry gratuito a State Island para ver la Estatua de la Libertad (y darte cuenta de lo pequeña que es para decidir si te vale la pena pagar para ir hasta ella), ir a una misa Gospel en Harlem y, por último: buscar todo el street art que puedas en los barrios de Nolita, Little Italy y Chelsea. Aunque, para ser sinceros, lo encontrarás en todas las esquinas. ¿Será ese uno de los motivos por los que me gusta tanto esta ciudad?
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No lo voy a negar: ojalá hubiésemos podido hacer la ruta en 15 días, o incluso 20. Pero la realidad es que teníamos menos de 2 semanas y queríamos visitar San Francisco para ver a unos amigos y ya de paso, conocer algunos de los puntos más importantes de esta famosísima ruta.
El viaje a Costa Oeste es un sueño viajero para todos los que disfrutamos descubriendo el mundo. Podría hablar del Gran Cañón, del Golden Gate, de las cascadas de Yosemite o de Horseshoe Bend. Pero si hay 5 cosas que creo que me encantó hacer en mi primer viaje, fueron las siguientes: