Todo lo que necesitas saber del Taman Negara

13.08.2024

Si estás leyendo este post probablemente estás organizando un viaje por Malasia. En nuestra aventura de 6 meses recorrimos Malasia durante 17 días y le dedicamos dos días y medio (1 de viaje y 1 y medio de visita) a esta zona de la selva más antigua del mundo que tiene más de 4000 km cuadrados.

La parte más visitada es la que se encuentra alrededor de Kuala Tahan, pero te aviso desde ya que no es algo ultra auténtico. Está bastante explotado a nivel turístico. Nos pareció ideal para visitar con niños o para conocer la zona sin complicaciones, pero si lo que buscas es algo más "aventurero" quizás deberías buscar alguna otra zona del parque natural más virgen.

Cómo llegar por tu cuenta

La forma más económica (y menos organizada) de llegar hasta Kuala Tahan desde Kuala Lumpur es cogiendo un autobús hasta Jerantut y una vez allí os aparecerán mil señores que os venderán el autobús hasta Kuala Tahan. Por internet habíamos visto paquetes que combinaban los dos autobuses y costaban unos 20€ por persona, casi todos de la compañía NKS. Haciéndolo por separado y comprando en RedBus el trayecto hasta Jerantut nos ahorramos la mitad. Teníamos miedo de llegar allí y que no hubiesen autobuses hasta el parque, pero ¡qué va! Ya lo tienen todo organizado los de NKS para acercarse a la estación de buses y recoger a toda la gente que tiene pensado pasar unos días en Taman Negara.

También verás que hay la opción de hacer en autobús hasta Jerantut y después en barca hasta Kuala Tahan. Si esta opción te apetece más, sí que te recomiendo que lo reserves todo con antelación: cuando mirábamos las opciones del segundo tramo del camino, esta posibilidad ya estaba agotada para ese día. Eso sí, el precio es más elevado y tarda más: el bus y el barco cuestan 31€ y el trayecto por el río es de 2.30h (mientras que por carretera es de 1h).

Dónde dormir

Después de visitar el parque, os podría resumir las opciones en 3:

Opción 1 – dormir dentro del parque natural. El "pueblo" de Kuala Tahan se separa de la entrada del parque por el río que hay que cruzar con un barquito que tarda 2 minutos y cuesta 20 céntimos (1 RM). Todos los alojamientos están al otro lado del río, en la zona de Kuala Tahan, excepto uno que está dentro de la selva, el Mutiara Taman negara. Cuando quisimos reservar este alojamiento estaba agotado (hemos visitado Malasia en agosto, temporada muy alta) pero las casitas de madera tenían muy buena pinta. Eso sí, no es apto para presupuestos ajustados de mochileros.

Opción 2 – y la que nosotros elegimos, dormir en el AsiaCamp, un hotel que no está en el centro del pueblo sino a 5 minutos en camioneta. Cuando lo reservé pensé que se podría ir andando (en el mapa queda muy cerca) pero la realidad es que no, todo es carretera y hay que ir en coche. Pero el hotel tiene servicio gratuito de transporte hacia Kuala Tahan. Simplemente les envías un whatsapp con la hora que quieres que te recojan y te vienen a buscar. La comunicación fue facilísima y el hotel bastante aceptable (las habitaciones con lavabo privado, las que lo tenían compartido eran de pena). Calidad-precio inmejorable: pagábamos 6€ por persona/noche.

Opción 3 – quedarte en algún motel/hostel en el mismo pueblo. Cuando buscábamos por internet nos parecía todo extremadamente cutre pero cuando llegamos no nos cambió la percepción: todos tenían una pinta horrible. Eso sí, estás justo al lado del río y puedes hacerlo todo andando.

Nosotros, si volviésemos a repetir esta zona, o dormiríamos dentro del parque si hubiese disponibilidad o volveríamos a elegir AsiaCamp.

¿Dónde comer?

Cuando lleguéis veréis que la variedad es mínima. Hay un restaurante dentro del parque (que miramos la carta y los precios y nos pareció de guiris) y luego varios restaurantes flotantes en el río, al lado de la entrada dónde básicamente está todo. Nosotros probamos 3 diferentes y más o menos todos nos parecieron similares. Buena calidad-precio, buenos noodles y buen arroz con pollo. En cuanto al precio, unos 3€ el plato.

Un poco más arriba del río, en el "centro" del pueblo, hay algún restaurante más, pero nos pareció demasiado auténtico para nosotros (la comida no nos daba buena pinta y la higiene brillaba por su ausencia).

En el AsiaCamp te ofrecen desayuno y cena. Nosotros cenamos una noche para hacer el safari nocturno (que te cuento más abajo) y el desayuno del último día y realmente, no vale la pena. Es "caro" para lo que ofrecen y creo que totalmente prescindible.

Excursiones y tours

Aquí llega la información que nosotros hubiésemos querido tener antes de llegar a este destino.

Tanto en internet previamente como una vez que llegues a Kuala Tahan, verás que en todos lados te ofrecen las mismas excursiones. Hay una de 5-6 horas para hacer trekking y llegar hasta una cascada. Hay otra para dormir 1 noche en una cueva. También puedes hacer "ráfting" o paseo en barca para ir a ver una "tribu nativa".

A nosotros nos parecieron todas las opciones una turistada y visitamos el parque por nuestra cuenta. Nada más entrar te darán un plano (previo pago de la entrada del parque, permiso para tomar fotos dentro del parque y el Canopy Walk) y solo tendrás que ir siguiendo las indicaciones.

El Canopy Walk, pasarelas colgantes por las copas de los árboels, es el más largo del mundo y la estrella indiscutible del parque. No solo te la cobran a parte sino que cuando llegamos nos dijeron que teníamos 1 hora de espera para acceder. Aprovechamos ese rato para subir hasta el Bukit Terisek, el punto más alto al que puedes acceder sin guía, y al volver hicimos el Canopy. Sinceramente, no nos entusiasmó, especialmente por estar saturado de gente. Pero, es verdad que ya que estás, por 1€ tiene su punto pasear por las alturas de la selva.

Respecto el safari nocturno (lo podías hacer a pie o en 4x4 y elegimos el primero) , sí que picamos. Lo ofrecían en todos lados y teníamos la curiosidad de probarlo, ya que nunca habíamos hecho uno. Pagamos los 9€ por persona y nos fuimos a ver, según nos habían dicho, tarántulas, escorpiones y muchos otros bichos nocturnos en la selva. Pues bien, no vimos nada. Pero básicamente porque habían decenas y decenas de personas haciendo el mismo tour, enfocando con las linternas a los árboles, y obviamente si había algún animal se largó de allí para que no le agobiáramos. Horrible experiencia de turismo de masas. No sé si es porque estuvimos en agosto y normalmente no es así, o porque no les importa para nada invadir ese pequeño trozo de la selva y ofrecerlo a los turistas sabiendo que no se verá nada....pero realmente fue un fiasco. Si estás leyendo esto y te lo estas planteando: huye.

¿Es para todos los públicos?

Claramente sí. Por suerte (o más bien por desgracia) toda la zona que se puede hacer sin guía tiene plataformas de madera, lo que hace que no haya ningún problema para ir con niños o con personas que no están en tan buena forma. Para nosotros fue un poco decepcionante, porque nos esperábamos algo más salvaje, pero claramente han priorizado la accesibilidad que la preservación de la esencia.

Consejos

Por último, te dejo algunos consejos para visitar el parque:

  • Reserva un día de viaje de ida y uno de vuelta. Aunque llegarás pasado el mediodía (si vienes de Kuala Lumpur) y a la vuelta también tendrás la tarde al destino al que vayas (en nuestro caso Cameron Highlands), las tardes no se aprovechan mucho y es mejor que cuentes que esos dos días son prácticamente de trayecto.
  • Lleva mucho agua y ropa transpirable. Creo que no he sudado tanto en mi vida por tanta humedad.
  • Protégete las piernas con pantalones largos y calcetines altos. En todos lados hemos leído que hay muchas sanguijuelas. Nosotros íbamos así protegidos y no tuvimos ningún problema.
  • Si tienes que esperar 1 hora para subir al Canopy, aprovecha para visitar otra zona. Quedarse 1 hora allí parado es una pérdida de tiempo enorme.
  • Haz todo lo que puedas por tu cuenta, ganarás autenticidad.
  • Come todas las veces que puedas en los restaurantes al lado del río: son más auténticos y mucho más baratos (¡además de deliciosos!)
  • Apúntate este rincón: Lubuk Simpon. Fue lo que más nos gustó del parque. Era un lugar al lado del río en el que estuvimos completamente solos. Un paisaje brutal. Si eres atrevido/a y no te da cosa meterte en el agua marrón hasta puedes bañarte, así que llévate el bañador.

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El tema del presupuesto es siempre super subjetivo y depende del estilo de viaje que quieras hacer. Como en todos lados, el hotel que elijas, los restaurantes o incluso las actividades que decidas hacer en cada ciudad influirán directamente en el presupuesto que necesitas.

Que los japoneses son súper organizados. Silenciosos en el transporte público y extremadamente puntuales. Que en los restaurantes hay miniaturas de los platos que ofrecen. Que hay un profesión que es la de "empujador" para que quepa más gente en el metro. Que pueden dormir en cualquier lado y en cualquier momento o que hablamos de uno de los...